Y yo quiero ser...Astrónoma Observacional
(Por
Andrea Verónica Ahumada)
Escucha música mientras lees, vete al final.
Me preguntan
por qué quise ser Astrónoma. ¿Qué es lo que me llevó a estudiar esta hermosa
carrera? Voy a la biblioteca de mi casa, y ahí está, destacándose entre todos
los libros. Lo tomo entre mis manos y lo vuelvo a ver con la misma alegría y
emoción de cuando mi Papá me regaló este libro hace ya más de 30 años... es
COSMOS de Carl Sagan. Al repasar sus hojas no puedo evitar escuchar en mi
cabeza la música que tenía al comenzar la serie hecha para la televisión. Lo
tomo entre mis manos y tarareando, vuelvo frente a mi computadora para escribir
sobre porqué soy Astrónoma.
Fig. 1.
"...El Cosmos es todo lo que es, todo lo que fue y todo lo que alguna vez será.
La contemplación del cosmos nos conmueve..."
Carl Sagan
(COSMOS, 1980, Ed. Planeta, 7ª edición, comienzo del capítulo primero)
Fue justamente
cuando tenía cerca de 10 años que por primera vez vi COSMOS y me dije: "yo
quiero ser Astrónoma", y como se imaginarán, es muy extraño que una niña
tan pequeña de esa respuesta a quién le pregunta: ¿qué quieres ser cuando seas
grande?
Tuve
la suerte que mi Familia siempre me alentó a perseguir mis sueños, y que
además, en donde vivo, existía la carrera de la Licenciatura en Astronomía. La
misma se continúa dictando en la Facultad de Matemática, Astronomía y Física (FaMAF)
en la Universidad Nacional de Córdoba, Argentina. Debo decir que cuando, siendo
adolescente decía que iría a la FaMAF, la reacción de las personas en general
era de señalar que esa era una carrera de locos, que en general iban hombres,
que había que ser un genio para ir allí, y que si me recibía, no podría vivir
de ello. Y llegó el día, haciendo oídos sordos a esas opiniones de comenzar ese
camino, en el cual me hice de amigos que aún conservo. La carrera me costó
mucho al principio, porque más allá de lo duro de los contenidos de las
materias que veíamos, que fueron principalmente Física y Matemática, yo no
tenía una buena base para el primer año, ya que había hecho mis estudios en un
colegio comercial. Estudiaba y estudiaba, y a veces los resultados no eran los
que yo esperaba, pero como estaba convencida que yo quería ser Astrónoma, me esforzaba
más, le buscaba diferentes vueltas a la manera de estudiar, hasta que un día,
después de algunos años, llegó el momento de preparar mi tesina para optar al
grado de Licenciada en Astronomía.
Los
últimos dos años de la Licenciatura se dictan totalmente en el Observatorio
Astronómico de la Universidad Nacional de Córdoba, y allí debía elegir algún
profesor para que fuera quien me dirigiera en mi tesina. De la misma manera en
que estaba convencida que quería ser Astrónoma, también lo estaba de querer ser
Astrónoma observacional, y tuve la buena fortuna que, después de varias charlas, el Profesor
Juan José Clariá aceptara ser mi director. El tema a investigar fue acerca de
los cúmulos estelares tanto de nuestra Galaxia como de las dos galaxias
cercanas llamadas Nubes de Magallanes, sobre los que también hice mi doctorado
en la FaMAF, y que aún hoy estudio, en compañía de quien fuera mi director y
que hoy además es mi amigo. Poder observar esos grupos enormes de estrellas y
luego, a partir de esas observaciones, determinar sus propiedades
fundamentales, tales como edades, cantidad de polvo, metalicidades, me llena de
entusiasmo y de intriga. Conociendo estos objetos, podremos lugar inferir las
propiedades e historias de las galaxias a las que pertenecen.
Siempre
he trabajado con datos observacionales, que en general yo obtengo. Si bien no
puedo olvidar el hechizo que sentí la primera vez que vi un telescopio en
serio, el de la Estación Astrofísica de Bosque Alegre (Córdoba, Argentina), mi
fascinación continuó en aumento, mientras continuaban creciendo los telescopio
con los que iba trabajando: el del Complejo Astronómico el Leoncito (CASLEO,
Argentina), los del Observatorio Interamericano de Cerro Tololo (CTIO, Chile),
hasta llegar a trabajar con los grandes telescopios. Sí, en efecto, pude lograr
el sueño de mi vida como Astrónoma observacional al obtener un puesto de
postdoc en el Observatorio Europeo del Sur (ESO), trabajando durante 250 noches
con los telescopios UT de más de 8 metros de diámetro en el Observatorio de
Cerro Paranal (Chile). Allí, observaba los proyectos observacionales de otros
colegas en el "modo servicio", teniendo la oportunidad de observar
galaxias tan distantes que ni siquiera eran visibles, pasando por estrellas a
punto de estallar, como Eta Carinae, hasta objetos tan cercanos y familiares
como el planeta Marte. Mis años allí, fueron inolvidables.
Estando
en la ESO tuve, además, la oportunidad de trabajar un año en el Observatorio de
Bologna (Italia). En estos dos observatorios tuve la suerte de tener por
"jefes" a los Drs. Michael West y Angela Bragaglia, de quienes guardo
un hermoso recuerdo.
Y
más allá de todos los viajes que pude hacer gracias a mi carrera, en diferentes
observatorios y yendo a congresos en diferentes partes del mundo, conociendo
lugares y colegas que se convertían en amigos, yo quería volver a mi Córdoba,
cerca de mi Familia en Argentina. Hoy en día soy docente en el Observatorio
Astronómico y miembro del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y
Técnicas (CONICET). Tengo la oportunidad de vivir dignamente siendo Astrónoma,
haciendo docencia, investigación, divulgación y también gestión. Respecto a la
divulgación de la Astronomía, quisiera resaltar la enorme satisfacción personal
que significa ver la fascinación de la gente al presentar una charla, ya sea en
una escuela con niños pequeños o en un taller de adultos con personas de edad
avanzada. Personalmente, yo creo que, en palabras de Mario Bunge “... es deber de todo profesor de ciencias,
de divulgarla extra muros, dentro y fuera de la Universidad, dar conferencias,
cursos, en donde fuere...”.
En
breve, pienso que este es un lugar oportuno para agradecer a Carl Sagan, ya que
es por “COSMOS” que soy astrónoma. Fue viendo su serie que de pequeña soñé con
estudiar Astronomía. Tuve la suerte que mi Familia me acompañara para concretar
mi sueño. Hoy tengo la fortuna de trabajar como astrónoma y vivir de mi
profesión. ¿Cuál es mi recomendación? ¡Qué persigas tu sueño! No hay que ser ni
genio, ni superdotado, ni estar altamente preparado para hacer la carrera de
Astronomía, aunque ciertamente te sería más fácil, sólo tienes que sentarte a
estudiar y maravillarte de lo que aprendes. Si tienes la posibilidad de
estudiar lo que te gusta, ¡adelante entonces!
Andrea Verónica Ahumada
Doctora
en Astronomía
Universidad
Nacional de Córdoba, Observatorio Astronómico
Consejo
Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET)
Argentina
Escucha música mientras lees.
Un gustazo haber sido compañero de Andrea en la carrera de Astronomía. Y comparto su motivación y el porqué yo también soy astrónomo.
ResponderEliminarGracias René! Un abrazo desde Córdoba ... de la Nueva Andalucía =)
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